Fantasmas de mi ciudad.

Gris. Espesa. Osada.
Amenazante. Oscura.

Así es ella.
Arranca ganas y tiempos.
Ofende sueños.
Disfruta muerte.

Atrevida. Audaz. Intrépida.
Sinvergüenza. Fanfarrona.

Así quiere ser.

Desgarrando planes y proyectos.
Transitando calles despedazadas
Trascendiendo sueños lavados
Espiando dolor y muerte.

Decidida. Resuelta.
Insolente. Tenaz.

Disloca fantasías casi posibles
Lastima ilusiones deseadas.
Retrasa comienzos esperados.
Tuerce tutores del alma.

Pero no lo logra.

No puede dañar, deslomar, herir,
Lisiar, fracturar, lacerar nuestra sonrisa.
Aunque llegó el otoño.
Pasó el dos de abril tan ilusionado, temido y odiado.
Pero aquí, otra vez, estamos.
Enteros.
Como el fénix.
No tenemos miedo.
No màs.

Roxi
(Un lunes cualquiera en que la tormenta sacude fantasmas entre diagonales
y la catedral vigila una redoma de esperanza.)